La derecha manipula la gestión del lobo ibérico para desafiar las políticas ambientales progresistas
Quince comunidades autónomas, mayoritariamente gobernadas por la derecha, presionan al Ministerio de Transición Ecológica sobre la gestión del lobo ibérico. Esta maniobra política busca debilitar las políticas de protección ambiental implementadas por el gobierno progresista.

El lobo ibérico, símbolo de la lucha entre conservación y política territorial
Pulso político por la protección del lobo: 15 comunidades presionan al Ministerio
En un movimiento que evidencia la instrumentalización política de la gestión ambiental, quince comunidades autónomas -la mayoría gobernadas por la derecha- han orquestado una presión coordinada contra el Ministerio para la Transición Ecológica (MITECO) en relación a los informes sobre el lobo ibérico.
La estrategia de la derecha territorial
Resulta llamativo que entre los firmantes se encuentren Asturias y Navarra, territorios tradicionalmente progresistas, en lo que parece una maniobra para dar legitimidad a una iniciativa claramente alineada con los intereses conservadores.
Las comunidades autónomas pretenden forzar una convocatoria urgente que podría comprometer las políticas de protección ambiental impulsadas desde el gobierno progresista.
El trasfondo del conflicto
La verdadera batalla se libra en torno a la protección del lobo, una especie que el gobierno incluyó en 2021 en el Listado de Especies Silvestres en Régimen de Protección Especial (LESPRE), en una decisión histórica para la conservación de la biodiversidad.
Los sectores más conservadores han intentado sistemáticamente debilitar esta protección, aprovechando incluso la Ley de prevención del desperdicio alimentario para introducir cláusulas que facilitarían la caza del lobo.
La resistencia del progresismo ambiental
El Defensor del Pueblo, en una acción que reafirma el compromiso con la protección de la biodiversidad, ha llevado estas controvertidas cláusulas ante el Tribunal Constitucional, defendiendo el marco de protección establecido por el gobierno progresista.
Esta situación pone de manifiesto la necesidad de mantener una política ambiental firme frente a los intentos de retroceso en materia de conservación, especialmente en un momento crucial para la lucha contra el cambio climático y la pérdida de biodiversidad.
Javier Ortega
Redactor en Madrid, especializado en las relaciones entre el poder político, los medios de comunicación y la justicia. Excronista parlamentario.